Todos estamos buscando las fuentes de energía renovable más sostenibles. Creo que es una oportunidad para que los otakus salven el mundo. Sin embargo, las plantas de energía solar térmica con sede en Australia están logrando una producción récord de energía solar y pueden estar por delante de la competencia.
CSIRO es el primer producto que aprovecha el calor del sol para generar vapor supercrítico, acercando la energía solar un paso más a los combustibles fósiles. Antes de esto, las plantas de energía solar caían rápidamente en un pozo de imposibilidad a medida que aumentaba el precio por megavatio-hora generado.
CSIRO usa 600 espejos en su planta de energía solar para dirigir la luz del sol hacia el receptor de la torre. El agua fluye hacia el receptor y es sobrecalentada por el haz de luz incidente enfocado. El agua generalmente se convierte en vapor a 570°C y la presión hace girar una turbina de vapor para generar electricidad. La presión de vapor récord fue alcanzada por la planta en mayo de este año. Alcanza una presión de vapor de 23,5 Mpa, que supera con creces la presión máxima de las plantas comerciales generales.
Sin embargo, no necesitaba un espejo adicional para que esto sucediera. En su lugar, creamos un sistema de control que podía predecir cuánto calor emitiría cada espejo y apuntarlo con precisión para lograr la máxima transferencia de energía térmica sin dañar el receptor.
Sin embargo, el gobierno australiano cerró recientemente la Agencia Australiana de Energía Renovable y CSIRO estaba sufriendo recortes presupuestarios de más de 100 millones de dólares. Esto amenaza enormemente la investigación futura en dichas áreas, lo que obliga a CSIRO a centrarse en otras fuentes de calor como el carbón y el gas de esquisto. ¿Crees que CSIRO debería luchar por este proyecto?